¡Basta de criminalizar al sector salud! Por una trabajadora de la salud
- Periódico Labor
- 1 may 2018
- 3 Min. de lectura
El triunfo de la Revolución Mexicana se encuentra garantizado en la Constitución que retoma ideas del contexto internacional, en 1919 triunfa la revolución rusa y se constituye la III Internacional basada en pensamiento anarquista, socialista y cooperativista, compaginando con la cosmovisión de las comunidades indígenas.
Al mismo tiempo México entra en su etapa de desarrollo industrial y científico, se modernizan los servicios al amparo de la Carta Magna; el artículo cuarto define que toda persona tiene derecho a la protección de la salud.
Pero poco a poco hemos degradado este derecho, el país destina menos del 6% del PIB -muy por debajo de la mayoría de los países- y repercute en la cantidad, calidad y distribución de los recursos. El IMSS e ISSSTE tienen una deuda de 6 billones de pesos debido a su mala administración, corrupción y colocando a secretarios de salud improvisados por decir lo menos; la privatización y robo de las pensiones haciéndonos “accionistas forzosos” en proyectos de muerte como el nuevo aeropuerto de la Ciudad de México.
Como trabajadores de la salud tenemos claro dicho proceso, pues nos encontramos en ese trágico lugar donde en ocasiones tenemos necesidad de atención médica y además laboramos en lugares con falta o falla en materia de infraestructura, equipo y personal; con protestas que no son escuchadas como el caso de las enfermeras de Chiapas donde ponen en peligro su propia salud, ya que aunado a esto no reciben salario por el ejercicio de su profesión misma que no es reconocida a nivel nacional como licenciadas ni especialistas como en cualquier otra carrera seria lo obvio.
A esto le sumas la violencia sistémica que afecta al país donde enfermeras y medicas acuden a comunidades apartadas a realizar su servicio social y son violadas o asesinadas al igual que sus colegas hombres cuando ya no les sirven al narcotráfico.
Hemos enfrentado al interior de nuestras instituciones acoso laboral, hostigamiento, abuso sexual y sanciones sindicales pues la mayoría de estos son copados, tergiversados de su origen y represores de sus agremiados como si no pertenecieran a la misma base trabajadora.
Y si esto fuera poco, el seguro popular es un mecanismo que permite “legalmente” acelerar el deterioro de las instituciones públicas desviando recursos para su funcionamiento para una simple atención básica pero eso sí, rindiendo frutos en la cooptación del voto y de igual forma pasan por la pérdida de derechos, criminalización y despido de los trabajadores.

El precio por la salud, también llamada reforma a la salud, vulnera y en otros casos extermina a los sectores más pobres y que se encuentran en comunidades apartadas debido a los impagables costos de los seguros.
Esta probadita de infierno no termina aquí; las agresiones de parte de usuarios intoxicados que al tomarle los signos vitales nos golpean, pedirles respeto hacia otros pacientes, los familiares que nos dicen ¡Gracias a mi tragas!, nos tachan de ladrones cuando ellos pierden sus pertenencias, en áreas de choque donde llegan jóvenes baleados y después nos avisan que pasaran a rematarlo pero la banda del joven lo evita y entonces el personal de salud se encuentra en medio intentando salvar una vida, es un problema cada vez más recurrente.
En general el personal de salud se encuentra inmerso en largas horas laborales que oscilan entre 19 horas para personal de contrato y 36 horas para médicos en formación que según estudios una persona que no duerme tiene la misma capacidad de respuesta que una persona alcoholizada.
La criminalización de nuestro trabajo confundiendo el homicidio culposo o negligencia con intervenciones médicas que dado el propio padecimiento culminaron en muerte como el caso de los 16 médicos o ahora el caso del doctor Luis, sólo por mencionar a los “más famosos”.
¿Qué nos queda? Concientizar a los usuarios que estas fallas no son nuestras, son parte del sistema corrupto y traidor, que desconoce los principios y normas que rigen nuestra labor la cual se basa en el método científico y en guías de práctica clínica en la atención medica avaladas internacionalmente porque en este sector no nos basamos en el compadrazgo o en plurinominales, somos un equipo donde cada miembro es importante para el cuidado atención y funcionamiento de cada persona que se encuentra con alguna necesidad de atención a la salud.
CORRESPONSAL OBRERO es una sección hecha para dar a conocer las condiciones de vida y las demandas de trabajadores de diferentes áreas.
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