Congreso Nacional Politécnico: ¿Para Qué y Para Quienes?

"¡Deja tu huella!", exclama la Dirección General del Instituto Politécnico Nacional (IPN) a través de sus órganos de difusión, haciendo un llamado a la comunidad a participar en el Congreso Nacional Politécnico (CNP), un congreso que se anuncia será de carácter refundacional.

De esta manera lo que pretende es acoplar al IPN en la actualidad nacional, es decir, ya no existe aquel país que apostó por el desarrollo tecnológico y científico, aquel que demandaba manos calificadas que echaran andar la naciente maquinaria de producción nacional y que fuera sostén del estado por muchos años, como lo fueron los petroleros, electricistas, químicos, biólogos, los que manejaban las telecomunicaciones, aquellos que llevaran salud a cada rincón del país con la figura del médico rural, los que manejaran la administración pública. Hoy el Poli ya no encaja como pieza fundamental en este país entregado a los intereses de los grandes capitales.

En este sentido, para su “refundación” se requiere transformar su esencia, ya sea reformando la carta magna del IPN, su ley orgánica, reduciendo planes y programas de estudio, imponiendo reglamentos, o como es el caso impulsando un CNP donde todo lo anterior pueda ser legalmente aprobado.

Dirección general actualmente impulsa el congreso de la mano de una Asamblea General Politécnica (AGP) totalmente servil a sus intereses, y le apremia hacerlo, pues, ha notado el terrible momento por el que atraviesa el movimiento estudiantil, la presencia de un desinterés generalizado de todos los sectores. La AGP es hoy en día el órgano “representativo” que legitima a diestra y siniestra la voluntad de la dirección general. Prueba de ello fue el acuerdo 02/2017 donde acordaban entre la dirección general y la AGP diversas disposiciones para el personal académico, sin considerar a los propios docentes, ni su gremio.

Desde 2014 fueron simples las demandas de la comunidad.

• Democratización del IPN

• Educación gratuita, de calidad y de carácter popular.

• Consolidación del IPN como institución rectora de la educación tecnológica.

• Defensa y aumento del presupuesto.

• Mejores condiciones laborales y de estudio.

• Transparencia en gastos de administración.

Con esto denunciamos la imposición de una agenda claramente a favor de la dirección general que obviamente ven con buenos ojos las instancias del gobierno federal.

Desde nuestra óptica creemos indispensable fortalecer la organización estudiantil, retomar el método asambleario, generar estructuras de representación que sustituyan al servil Consejo General Consultivo, figura que en 2014 aprobó la imposición del reglamento interno.

Desde el Colectivo Acción y Resistencia hacemos un llamado a la organización, a continuar la lucha de las generaciones pasadas, las que ganaron una ciudad politécnica, un internado para estudiantes foráneos (que posteriormente no supimos defender), los que lucharon por tener una ley orgánica, por la validez de los títulos que expedía el IPN. Por seguir poniendo la técnica al servicio del pueblo trabajador.

¡NO AL CNP SECUESTRADO POR LA DIRECCIÓN GENERAL!

¡NO A LOS iNTERESES CORPORATIVISTAS DE FERNANDEZ FASSNACHT Y LA ANUIES!