Pérdida del poder adquisitivo y sus efectos en la clase trabajadora
- Stein
- 29 may 2017
- 3 Min. de lectura

Día a día escuchamos a través de los diferentes medios de “comunicación” masiva hablar de la situación en la que se encuentra el país, principalmente escuchamos sobre la situación economía y como su situación se determina por el comportamiento del mercado, es decir, a través de la oferta y demanda; se habla de las variaciones en el precio del dólar, los combustibles y el desempleo, pero muy raras veces se habla de la importancia que representa el salario mínimo para los trabajadores, ya que como lo sabemos muy bien –por que lo vivimos diariamente es muy bajo y no alcanza para satisfacer las necesidades básicas - que por derecho corresponde- de las familias.
Desde la década de los 80´s con la llegada del neoliberalismo se ha ido agravando la tendencia a la baja del salario en el país, por lo cual no es raro que de los 34 países que conforman la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) México sea el país con los salarios más bajos; lo que representa que el poder adquisitivo –es decir que cada vez podamos comprar menos productos y también adquirir menos servicios- va también a la baja, un ejemplo de esto sería que en el 2012 el salario mínimo era de $ 62.33 y el costo por boleto del metro era de $3, por lo que en ese momento se podía comprar 20.77 boletos y por el contrario, en la actualidad el salario mínimo es de $80.04 con el cual se puede comprar 16 boletos, en total se compran 4.33 boletos menos en comparación. La Comisión Nacional Salarios Minimos (CONASAMI) que es la instancia supuestamente encargada de procurar que haya una equidad en el salario, conforme a lo estipulado en la Constitución, publico un estudio donde argumenta que el salario por día debería ser de por lo menos $200 para satisfacer las necesidades de una familia de cuatro personas, pero en realidad, ¿qué parte de la población es la que obtiene realmente estos ingresos? Cada vez se reduce mas el porcentaje de la población que obtiene un ingreso estable y, por el contrario, va en aumento las personas que viven en la pobreza. Además en este estudio no se contempla los gastos que toda familia realiza en vestido, calzado, educación y vivienda, necesidades básicas a las que toda población debe tener acceso. El organismo antes mencionado junto con el sector empresarial y los sindicatos corporativistas –“charros”- son los encargados de fijar el salario mínimo, cabe mencionar que estos solo obedecen las políticas dictadas por los países imperialistas, pero ¿por que no suben los salarios? Los economistas burgueses nos dan dos razones principales: el primero, que habría una alta tasa de desempleo ya que a los capitalistas les sería “difícil” cubrir los salarios con el aumento y la segunda seria un aumento en la inflación ya que las personas demandarían mayor cantidad de productos y servicios al tener mas dinero, pero en realidad lo que buscan los capitalistas es seguir manteniendo su tasa de ganancia a como de lugar y si les es posible aumentarla manteniendo los salarios bajos.

El poder adquisitivo no es el único golpe a la clase trabajadora, otro factor que debemos considerar es la extensión de la jornada laboral, ya que firmamos contratos que nos someten a una esclavitud moderna -porque resulta ser la única opción para poder conseguir un salario y poder subsistir- dejando de lado el tiempo que dedicamos a la familia o amigos; podríamos concluir, losque horneamos el pastel y lo hacemos cada vez más grande, cada vez nos toca una rebanada más pequeña. Es evidente que la miseria en la que vivimos es insoportable, debemos reconocernos como la única clase que es la generadora de las herramientas que darán fin al capitalismo y la única generadora de la riqueza, porque “el obrero tiene más necesidad de respeto que de pan”.
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